Evolución fotográfica 2

En una anterior entrada de hace casi un año, hablaba de la evolución que había tenido mi carrera desde una caja de cartón a unos minifocos de baja calidad. Pues ahora entramos en la tercera base, que dirían los americanos.

Facebook

Desde hace bastante tiempo hay gente que me incita a crearme una cuenta de facebook, pero de momento yo me niego. No es que me parezca una mala herramienta, ni mucho menos, pero sí que creo que está adquiriendo una serie de connotaciones, o al menos es lo que me parece a mí, a las cuales no me apetece adscribirme.

Hay gente que se deja de hablar porque no le han contestado a través de la red social, otros que se reencuentran con gente a la que creían olvidada en lo más profundo de sus recuerdos y de pronto la pesadilla resurge de nuevo en su "muro". No gracias. Ahora no me interesa, no descarto que dentro de una temporada ceda a la muchedumbre y me apunte, pero hasta entonces, para todos lo que lo requieran... este es mi perfíl.

Feliz Aniblogsario

Pese a mi escasa perseverancia en los proyectos personales, en lo profesional es otra historia, parece que he conseguido que este blog haya cumplido un añito. Aún sigo sin saber hasta donde llegaré con él, pero de momento más de 10 personas han entrado cada día a ver lo que me pasaba por la cabeza.

Gracias a todos.

Zapatos nuevos

Antes se decía que los niños estaban contentos como si les hubieran comprado unos zapatos nuevos. Supongo que ahora habría que cambiar la expresión por: "como un niño con consola nueva". Pues yo estoy así.

Mis trabajos hasta altas horas de la mañana delante del ordenador me ha costado conseguir un buen equipo de iluminación pero por fin lo tengo. Ya no tendré que improvisar iluminaciones de estudio con cajas de cartón, aunque recordaré aquella época de mi vida con el más grande de los cariños, porque todos hemos tenido un principio.

1 Comentario 1 Café

Cuando hace un año, menos 6 días, comencé a ilustrar este blog confiaba en que la gente lo siguiera, dado que sin vosotros esto no tendría ningún sentido, y lo estáis haciendo. Pero una vez conseguido el objetivo principal de este extraño diario personal, ahora intentaré ir un poco más allá. Mi idea es que los que me leéis aportéis algo, que saquéis de vuestras cabezas unas frases que completen cada entrada, ya sea de los textos o de las imágenes, o de temas que no tengan nada que ver, eso lo dejo a vuestra elección.

Y para conseguirlo voy a comenzar con un pequeño incentivo, una zanahoria en el morro del burro para que tire del arado, una prima por ganar un título, una palmada en la espalda por un trabajo bien hecho, ya me entendéis...

Invitaré a un café a todo el que ponga comentarios, no solo en esta entrada sino en cualquier entrada futura, aunque como comprenderéis que los que me leéis desde fuera de Logroño lo vais a tener un poco más difícil para cobrar vuestra recompensa.

Gracias a todos por vuestra colaboración

En menos de un segundo

Cuando demasiados objetivos apuntan a una escena que se desarrolla en menos de un segundo, ten por seguro que al menos una vez coincidirás exactamente con el disparo de otro compañero. La mayoría de las veces descartas las imágenes porque la mitad de la foto está quemada o algo por el estilo, pero hay veces que el juego de iluminación es tan extraño que hasta merece la pena publicarla en un blog.

Cambios

Supongo que a todos nos pasa que algunos días, unas personas más y otras menos, nos levantamos con ganas de romper. De dar un cambio a nuestras vidas de una forma o de otra. Igual es por ese bucle en el que algunos sienten estar, o porque de pronto muchas cosas, que parecen todas, empiezan a salir mal.

Unos contrarrestan estos estados de ánimo comprando, otros pasean con sus vehiculos, otros se dan a las drogas, legales o no, y otros se van a la peluquería y cambian el look. ¿que creeis que haría yo?

Mi dulce condena

Llegará el día en que mis pulmones no dependan más que de aire para sobrevivir, igual ya lo podrían hacer, pero cada vez que me siento detrás de una taza de café o delante de mi ordenador, instintivamente enrollo un cilindro nicotínico y le doy uso.

A veces pienso lo maravilloso que era cuando podía correr sin ahogarme, o cuando los rayos del sol que atravesaban mi ventana a primera hora de la mañana me despertaban y no tenía esa carraspera ni esas flemas a las que ya me he acostumbrado. En esos momento pienso... mañana lo dejo, pero el mañana nunca llega, porque al día siguiente ya estoy enganchado al humo otra vez.

Está claro que no me voy a pasar la vida entera fumando, pero cuando me planteo una fecha para dejarlo todas me parecen malas, así que... Mañana lo dejo¡¡¡